miércoles, 23 de marzo de 2011

Primeros periodicos en Mexico

PERIODISMO EN MÉXICO

Las bases del periodismo en nuestro país se remontan a la época colonial, en el siglo XVI, cuando circularon por las calles de la capital de la Nueva España los famosos pregoneros, que a pulmón abierto gritaban en plazas públicas o sitios de gran concurrencia como los mercados, las noticias de actualidad. Obviamente que esta labor era realizada bajo la supervisión de las autoridades coloniales, que a través del cabildo otorgaban permiso expreso a estos ingeniosos hombres.
            La llegada de la imprenta a México ocurre en 1539, cuando a instancias del arzobispo Fray Juan de Zumárraga llega a radicar en la capital de la Nueva España el impresor italiano Juan Pablos. De manera paulatina se fueron instalando más talleres de impresión con lo que inicia la circulación de hojas volantes. La primera de ellas que se impresa en nuestro país es el Mercurio Volante, editado en 1693 por el intelectual Carlos de Sigüenza y Góngora, con noticias de carácter histórico y científico.
            Una de las hojas volantes más antiguas que se conocen y que ha servido como fuente de datos para varios historiadores es la Relación del terremoto de Guatemala, evento que ocurrió en noviembre de 1541, aunque el volante circuló en México hasta 1542.
            En enero de 1722, el clérigo católico y doctor Juan Ignacio de Castorena y Ursúa funda la Gaceta de México y noticias de Nueva España, considerado como el primer periódico de México, donde publica informaciones religiosas, oficiales, comerciales, sociales, mineras y marítimas. Este órgano mensual duró de enero a junio de ese año.
            Desde entonces, los periódicos y las hojas volantes en México y en el resto de Hispanoamérica tuvieron una utilización práctica. Jorge Calvimontes en su libro El Periódico establece que en una gaceta de la época colonial (1760) era posible encontrar una columna de acontecimientos o la historia de la época, un ensayo de origen local o importado sobre cualquier tema, desde astronomía hasta el cultivo de las zanahorias [...] En las colonias el periódico se popularizó porque se adaptaba perfectamente a los requerimientos de hombres ocupados que tenían gran necesidad de información práctica sobre todos los temas en palabras sencillas (1).

Primeros periodicos en Europa

La prensa española en el siglo XVIII
En España no se produce un desarrollo de la prensa hasta el siglo XVIII. En esta época los periódicos eran muy caros y sólo estaban al alcance de una minoría. Los editores contaban únicamente con el producto de la venta, ya que la publicidad no se generalizó como medio de financiación hasta el siglo XIX.
La prensa del siglo XVIII constituyó uno de los cauces más importantes por el que penetraron las ideas ilustradas en España.
Podemos distinguir tres etapas:
1.- Entre 1837 y 1750 : consolidación de la prensa en España, con la aparición de los primeros periódicos, como El Diario de los Literatos.
2.- Entre 1950 y 1970: época de madurez y especialización.
3.- Desde 1770: momento de decadencia , desaparecen muchas publicaciones debido a los acontecimientos políticos y la situación exterior (Revolución Francesa) .
Se distinguían claramente dos tipos de publicaciones diferentes: la prensa culta o papeles periódicos y la prensa popular.
La prensa española del siglo XIX
La Guerra de la Independencia creó una gran demanda informativa. Por otra parte, el gobierno provisional, reunido en Cádiz, decretó en 1810 la libertad de prensa y los ciudadanos querían saber qué ocurría en las sesiones de las Cortes... ; todo ello provocó la multiplicación de las publicaciones periódicas de todas las tendencias : periódicos liberales como El Conciso o El Robespierre Español ; anticonstitucionalistas como El Censor General ; e incluso afrancesados como La Gaceta de Sevilla o El diario de Barcelona.
Con el regreso de Fernando VII se volvió a interrumpir toda la actividad periodística : El 25 de abril de 1815 prohibió cualquier publicación no oficial. A partir de este momento y durante toda la primera mitad del siglo se suceden los periodos liberales, en los que la prensa puede desarrollarse, y las etapas absolutistas en las que se prohiben este tipo de publicaciones.
En 1834, tras la muerte de Fernando VII, regresan a España los liberales expulsados en 1823. Estos exilados no sólo traen las ideas románticas, sino las nuevas formas de hacer periodismo de los ingleses.
Los periódicos anteriores a 1835 apenas incluían informaciones. Trataban temas políticos o científicos. Solían tener formato pequeño, estaban escritos en una columna y su aspecto era bastante aburrido. Pero a partir de esta fecha surgen otros más parecidos a los actuales. Desde 1868 siguen existiendo periódicos de opinión, defensores de un partido o líder político, pero se desarrolla una prensa informativa que es la que más éxito tiene entre los lectores y la que alcanza mayores tiradas. El aspecto externo de estos periódicos es más ameno. Su contenido ya no se limita a temas políticos, sino que aparecen nuevas secciones de crítica literaria, pasatiempos, anécdotas y humor. Dedican más espacio a la publicidad e insertan folletines, (novelas por capítulos) que gozaban de gran aceptación entre el público lector.
Tras la revolución de 1868, la Constitución de 1869 reconoce la libertad de prensa, por lo que, de nuevo, surgen numerosos periódicos y revistas. En 1883, la Ley de imprenta establecida por el gobierno liberal de Sagasta favorece también las publicaciones periódicas.
En las primeras décadas del siglo XIX la prensa sigue siendo un producto para minorías ya que la mayoría de la población era analfabeta. Las tiradas son muy pequeñas, nunca sobrepasan los 1.5000 ejemplares, pero tienen una amplia difusión debido a la tradición de la lectura en voz alta , la existencia de gabinetes de lectura y la costumbre de leer los diarios en los cafés, ateneos y tertulias. En Madrid y en las capitales de provincias fue creándose un público lector más amplio a medida que se extendió la educación. A partir de 1868 se desarrolla la prensa femenina. Tras el triunfo de la Gloriosa se abren escuelas para instruir a las clases más bajas y aparecen los primeros periódicos obreros. 

Los periódicos españoles en torno a 1900
Mientras en EEUU y Europa triunfa la prensa de masas y aparecen grandes rotativos como Le Petít Journal en París, el Dayly Mail en Londres o The Word en Nueva York, en España, aunque sigue vigente el antiguo modelo de prensa política, aparecen nuevos medios que se definen como independientes :
La Correspondencia de España (1848).
El Imparcial (1867) cuyo suplemento literario, Los lunes del Imparcial, publicó desde 1879 hasta 1906, bajo la dirección de Ortega Munilla, obras de los autores más importantes de la época : Zorrilla, Valera, Campoamor, Pardo Bazán, Rubén Darío... Los lunes del Imparcial "lanzó al estrellato" a los autores más importantes de la generación del 98 : Unamuno, Azorín, Baroja, Valle Inclán...
La Vanguardia (1881), periódico catalán creado en 1881 por los hermanos Godó.
ABC semanario fundado por Torcuato Luca de Tena , en 1903, que en 1905 se hizo diario. Tenía formato de revista e ideología monárquica y conservadora.
El Debate, defensor de las ideas católicas, creado en 1910, duró hasta el comienzo de la guerra. Era un periódico de calidad con preocupaciones políticas, religiosas y culturales. En su seno nació la primera escuela de periodismo.
El Sol, fundado en 1917 por Nicolás María de Urgoiti. Ortega y Gasset actuaba como principal inspirador intelectual y en él colaboraron, entre otros, Mariano de Cavia y Salvador Madariaga. El Sol quería renovar la situación política y social del país.
Son periódicos de empresa, que buscan ante todo la rentabilidad económica y que utilizan la publicidad como principal medio de financiación. Estos diarios tienen las mismas cualidades y objetivos que la prensa de masas pero no alcanzaron las grandes tiradas que caracterizó a los diarios extranjeros, debido a la inexistencia de un amplio público lector : España era todavía un país escasamente urbanizado, con elevados índices de analfabetismo.
Pero desde 1910 nuestros periódicos están preparados para convertirse en periódicos de masas : en los textos utilizan ya un lenguaje menos envarado y más ágil y se detecta cierta renovación léxica y estilística ; la diagramación es más atractiva y aparecen fotografías ; sus contenidos reflejan los gustos de la cultura de masas : entretenimientos públicos (fútbol, toros, teatro...), actos políticos, referencias a otros medios (prensa y cine), sección de cartelera, etc. Aparecen también páginas especiales o suplementos de economía, espectáculos, arte, deporte, agricultura, mujer y niños. Por otra parte, el impacto de la guerra europea potenció el interés por los temas extranjeros.

 

Historia del Periodismo

Historia del Periodismo

A la vieja tradición oral le siguieron los manuscritos hechos sobre papiros, pergaminos y papel, en los cuales egipcios, persas y los griegos relataban lo que sucedía a su todo alrededor, dejando, de esta manera, una gran constancia material de los acontecimientos de las diversas épocas en la historia del periodismo.
Un muy claro ejemplo de esto se da en Babilonia, donde, al parecer, existían unas ciertas personas que desempeñaban la gran tarea de historiógrafos, y cuya responsabilidad parecía ser la de escribir diariamente todos los acontecimientos públicos, religiosos y ademas los económicos en tablas de arcilla, valiéndose de signos cuneiformes para ello.
Pero el periodismo como tal segun la historia del periodismo fue naceido en Roma desde el momento en el cual se comenzaron a realizar comentarios, anales históricos y actas, en los que no sólo aparecen edictos sino que también noticias sobre la sociedad, sucesos y comentarios.

Más adelante, en la Edad Media, la práctica escrita de la información cayó en desuso, aunque algunos reyes escribieron las crónicas de sus gestas y los juglares contaron, de pueblo en pueblo, las hazañas de guerreros, los milagros y los acontecimientos de la época en las diversas regiones de Europa, volviéndose asi, a la tradición oral.
Es en el siglo XIII cuando recien se vuelve a las formas escritas de consignar lo que sucede, ello con la creación de la |Nouvelle manuscrite, en donde se difundían noticias. Luego , en el siglo XV, aparece el |Journal d'un burgeois, en París, con muchas noticias y anécdotas. Sin embargo,segun cuenta la historia del periodismo estos sólo eran algunos medios efímeros que no gozaban de mucha popularidad, lo que habría de cambiar durante todo el Renacimiento italiano, cuando, habida cuenta de la infinitud de sucesos que lo signaron, estos comienzan a aparecer un gran número de avisos y hojas que narraban lo que pasaba.
Así, nacen, en Venecia, las |gazzetas, en las cuales se daban noticias y acontecimientos portuarios y comerciales, propiciando que, a lo largo de toda Europa, el modo de uso de este tipo de publicaciones entrara en boga; además, la aparición en la historia de la ciencia de la imprenta de tipos móviles, contribuyó al auge de este tipo de medios de comunicación, estimulando a los intelectuales a publicar esta clase de escritos, los cuales fueron tomando forma de semanarios, diarios, revistas, etc., siendo en Inglaterra donde se empieza a hacer uun periodismo de interés público, haciendo de lo político tan sólo un tema másde que informar.

lunes, 21 de marzo de 2011

PRENSA EN LA INDEPENDENCIA


Posterior a la utilizaron como tribuna de lucha política los periódicos como José Joaquín Fernández de Lizardi en el Pensador Americano de 1812, donde se pronunció abiertamente por la abolición deetapa del periodismo colonial en México, la escritora Petra Mª Secanella ubica el inicio del periodismo político en México con la aparición del Despertador Americano (2), fundado por el cura Miguel Hidalgo en Guadalajara el 20 de diciembre de 1810 bajo la dirección de Francisco Severo Maldonado. Pero este no fue el primer periódico de la provincia; tres años antes apareció en el puerto de Veracruz el Jornal Económico Mercantil de Veracruz, con información muy ad hoc a las actividades del transporte y almacenamiento de mercancías de ultramar en esa ciudad.
            Aunque la elaboración de periódicos no fue considerada en esa época como una actividad que significara abundantes ingresos económicos, la práctica del periodismo fue eficiente para la difusión de corrientes de pensamiento entre grupos selectos de lectores que crecieron en número, conforme se fueron abatiendo los índices de analfabetismo en todo el país.
            A partir del Despertador Americano de Hidalgo, fue muy notorio que los periódicos que se editaron sirvieron como bandera de lucha ideológica de grupos precursores de las transformaciones sociales que buscaban en un México independiente. También con esa necesidad de divulgación ideológica, se propició la proliferación de los talleres de impresión en distintas ciudades.
            Hubo ejemplos muy admirables de hombres cabales que  la esclavitud. A la par del Pensador Americano de Lizardi, fueron surgiendo otras publicaciones insurgentes como el Sud de José María Morelos, el Correo Americano del Sur a cargo de José Manuel Herrera, el Aristarco Universal de Lorenzo de Zavala y el Ilustrador Nacional del doctor José María Cos, entre otros medios que diseminaron por gran parte del territorio mexicano el espíritu independentista.